José Antonio Llorente falleció el 31 de diciembre en Madrid. En paz, rodeado de su familia y hasta las últimas horas compartiendo con todos los que teníamos la suerte de trabajar con él su brillantez e, incluso en los momentos más complicados, su sentido del humor.
Compartir es, de hecho, uno de los verbos que mejor definen a José Antonio. Su generosidad es la base del proyecto que hoy es LLYC, ya que desde el principio lo diseñó para que fuera una empresa de socios, en la que los mejores tuvieran la oportunidad de ser accionistas y sentirse parte de un proyecto que trascendía a las personas.
https://elpais.com/economia/2024-01-01/jose-antonio-llorente-fundador-de-llyc-un-lider-marcado-por-la-generosidad.html